lunes, 6 de octubre de 2008

Plantas Inferiores










Una de las dos grandes ramas del reino vegetal comprende las plantas inferiores. Estas se caracterizan por carecer de flores, y por tanto, de semillas. Se reproducen por medio de esporas, de manera que también son conocidas como esporofitas.
Asimismo, abarca tres grupos con diferencias específicas: las talófitas, las briofitas y las pteridofitas.
Las talófitas están formadas por un cuerpo celular llamado talo, que no llega a ser un tallo. Las briofitas no tienen sistema vascular ni raíces, pero pueden absorber el agua por toda su superficie. Las pteridofitas son plantas inferiores con tejidos y vasos, y tienen raíz, tallo y hojas.






Briofitas: hepáticas y musgos
Las casi 25 clases de briofitas se caracterizan por ser plantas simples, de crecimiento lento que constituyen un grupo de características intermedias entre las talófitas acuáticas y los vegetales superiores. Poseen rizoides (pequeñas raíces que las fijan al sustrato), un talluelo y hojuelas. El talluelo presenta una diferencia en sus células y transporta el agua y las sustancias nutritivas, pero debe hacerlo por ósmosis, ya que no tiene tejidos conductores.
Las hojuelas contienen clorofila, y sobre ellas se forman las células sexuales.
La reproducción asexual se realiza mediante esporas y la sexual a través de gametos.
Las hepáticas son talos aplanados, de tonalidad verde rojiza o violácea. Su forma puede ser ondulada, ramificada y divididas. Viven en suelos húmedos o sobre troncos en descomposición.
Los musgos, en sus aproximadamente, 20000 variedades, son pequeñas plantas individuales que crecen junto a otras formando colonias que, a simple vista, se presentan como una especie de alfombra verde aterciopelada. El musgo es la primera planta con estructura diferenciada, con una raíz que se fija al suelo; un tallo erizado que transporta el alimento y hojuelas que trabajan en el proceso químico que da vigor a la planta al recibir la energía solar.
Existen los musgos propiamente dichos y los conocidos como Sphagnum, que agrupados en grandes colonias y a través de un proceso que puede durar varios años, conforman las denominadas turberas, muy utilizadas como combustibles fósiles y en la acidificación de los suelos en la producción de plantas ornamentales





Hepáticas talosas:
talo diferenciado en una parte superior asimiladora y otra inferior o ventral de reserva
crecimiento dicotómico (cuando el talo se divide lo hace en dos)
en la cara superior hay una epidermis monoestratificada, en la mayoría de especies perforada por poros simples o complejos que comunica con cámaras aeríferas delimitadas por células ricas en cloroplastos.
en la parte inferior del talo las células parenquimáticas son pobres en cloroplastos y la mayoría de las veces
en la superficie ventral, además de los rizoides, puede haber escamas monoestratificadas, a menudo de
color púrpura, dispuestas en dos o más filas y que, junto a los rizoides, conducen el agua a lo largo del talo









lunes, 22 de septiembre de 2008

Animales Vertebrados

Los Vertebrados (nombre científico Vertebrata, "que tiene vértebras"), son un subfilo muy diverso de cordados que comprende a los animales con espina dorsal o columna vertebral compuesta de vértebras. Incluye unas 58.000 especies actuales[1] y muchas fósiles.
Los vertebrados han logrado colonizar y adaptarse a diferentes ambientes, incluidos los más difíciles e inhóspitos. Aunque proceden inicialmente del medio
dulceacuícola, han conseguido evolucionar en el mar y pasar posteriormente al medio terrestre, el cual dominan en la actualidad.
El término "Vertebrata", usado en sentido amplio, es sinónimo de "
Craniata", e incluye los mixinos, que no poseen auténticas vértebras; si se usa Vertebrata en sentido estricto (solo los cordados con vértebras), debe excluirse dicho grupo. Sin embargo, hay evidencia que los mixinos deben ser incluidos.[2]
Características [editar]
Los vertebrados tienen
simetría bilateral y están provistos de un cráneo que protege el cerebro, y esqueleto cartilaginoso u óseo, que comprende una parte axial metamerizada (columna vertebral). Según los autores, se conocen entre 50.000[3] y unas 58.000[1] especies actuales.
Los vertebrados típicos tienen el cuerpo dividido claramente en tres regiones:
cabeza, tronco y cola; el tronco está a su vez subdivido en tórax y abdomen. Del tronco sobresalen las extremidades, que son impares en las lampreas y pares en el resto de vertebrados. Presentan notocordio en la fase de embrión, que es sustituido por la columna vertebral en estado adulto; la cabeza está bien diferenciada, y en ella se agrupan y centralizan la mayoría de órganos sensoriales y nerviosos. La estructura craneal de los vertebrados fosiliza con facilidad, lo cual ha sido fundamental para conocer su evolución.
Durante el desarrollo embrionario, las paredes del cuerpo de los vertebrados desarrollan unos orificios o hendiduras
branquiales, que dan lugar a las branquias (en los peces) y a diferentes estructuras. El esqueleto puede ser óseo, cartilaginoso, y en ocasiones presentar dermoesqueleto, consistente en unas formaciones cutáneas esqueléticas.
Aparato locomotor [editar]
El
aparato locomotor de los vertebrados se ha adaptado de su función inicial (la natación), a otras múltiples que permiten movimientos complejos según las condiciones registradas por los órganos sensitivos.
Los peces, habitantes del medio primigenio, sufrieron cambios evolutivos importantes a partir de la aparición de las aletas pares, que posteriormente se convirtieron en quiridios o extremidades locomotoras pentadáctilas (de cinco
dedos) cuando comenzaron la conquista del medio terrestre, y que sufrirían posteriormente adaptaciones específicas, tales como las manos aprensoras de los primates, las manos desgarradoras de los felinos, o las alas de sustentación aérea de las aves.
Sistema circulatorio [editar]
En los vertebrados el sistema circulatorio es cerrado, mediante el cual se transporta oxígeno y nutrientes a los distintos tejidos y células (presentan
glóbulos rojos que transportan el oxígeno mediante la hemoglobina). Consta de sistema sanguíneo y sistema linfático. Está dotado de un corazón dividido en cámaras, arterias, arteriolas, venas, vénulas y capilares. En los peces hay un circuito sistémico y otro branquial. En muchos vertebrados terrestres el sistema sanguíneo es doble (circulación mayor o general, y circulación menor o pulmonar), es decir no se mezclan la sangre arterial y venosa. El corazón de los peces presenta dos cámaras, una aurícula un ventrículo (dos aurículas y un ventrículo en los anfibios y reptiles). En las aves y mamíferos es tetracameral (dos aurículas y dos ventrículos), y con una serie de válvulas cardíacas. En los Vertebrados existe además un sistema linfático, encargado de recoger el líquido intersticial.
Aparato respiratorio [editar]
El sistema respiratorio de los vertebrados es branquial en los animales acuáticos (ciclóstomos, peces y larvas de anfibios), y pulmonar en los terrestres y en parte de los acuáticos.
Las branquias son un órgano o apéndice filiforme (en forma de laminillas vascularizadas), externa o interna según se disponga en el cuerpo. Tienen una función respiratoria, y están especializadas para el intercambio gaseoso en el medio acuático. Todas las branquias presentan en común una amplia superficie de contacto con el medio, y en ellas la irrigación sanguínea se encuentra mucho más desarrollada que en otras partes del cuerpo.
En las aves, el aparato respiratorio es sumamente eficaz; proporciona el oxígeno necesario para generar la energía que el cuerpo demanda por el esfuerzo desarrollado durante el vuelo. Consta de un sistema de bronquios que están conectados a unos sacos aéreos; los pulmones están divididos en alvéolos y lobulillos.

Sistema nervioso [editar]
El sistema nervioso de los Vertebrados comprende el sistema nervioso central, que a su vez consta de encéfalo y médula espinal; y el sistema nervioso periférico, que consta de numerosos ganglios y nervios (raquídeos o espinales); existe además un sistema nervioso autónomo que inerva las vísceras (sistema simpático y parasimpático). Los órganos sensitivos, así como las funciones motoras, son muy perfeccionados y desarrollados. Los nervios raquídeos se ramifican a diferentes niveles de la médula, e inervan los distintos músculos, glándulas y órganos. En el caso de los tetrápodos, aparecen dos engrosamientos en la médula, las intumescencias cervicales y lumbar, como consecuencia del desarrollo de las patas.

Sistema endocrino [editar]
El
sistema endocrino de los Vertebrados está muy perfeccionado; mediante las hormonas regula múltiples funciones del organismo. Está controlado por el hipotálamo y la hipófisis, que mediante la elaboración de mensajes bioquímicos ejercen su acción sobre las gónadas, páncreas, glándulas suprarrenales, etc
Aparato digestivo [editar]
El aparato digestivo de los Vertebrados evolucionó a partir de las primeras formas que se alimentaban mediante sistemas filtradores, hasta los vertebrados macrofágicos, que supuso una serie de adaptaciones de los diferentes elementos intervinientes: dentales, masticadores, musculares, e incluso de las propias cavidades internas, tales como los componentes enzimáticos necesarios para realizar la digestión.
El aparato digestivo de los Vertebrados consiste en una
cavidad oral, faringe, esófago, estómago, intestino y ano. Estos órganos están asociados a otras formaciones glandulares anexas, tales como las salivales, hígado y páncreas. En los tetrápodos, la cavidad bucal es de complejidad creciente; en ella se desarrollan un conjunto de estructuras auxiliares, tales como labios, lengua, paladar y dientes.
El intestino está compuesto de un porción estrecha (el intestino delgado), y otras más corta y ancha (el intestino grueso). En el primero se vierten la bilis del hígado y el jugo pancreático, que realizan una función proteolítica (hidrólisis de las proteínas), y se absorben los nutrientes a través de las microvellosidades. En el intestino grueso se absorbe el agua y se forman los desechos o heces.
Inicialmente, los Vertebrados primitivos se alimentaban mediante sistemas de filtración, los cuales pronto fueron reemplazados por otros más evolucionados. El resultado fue una reducción del tamaño de la faringe y del número de hendiduras branquiales. Excepto en los agnatos, que son los vertebrados más primitivos, los dos primeros arcos branquiales del resto de Vertebrados evolucionaron hasta transformarse en las mandíbulas, que se han especializado en la "captura" del alimento.Su aparato digestivo es completo

Aparato excretor [editar]
El aparato excretor de los Vertebrados está formado por el aparato renal y las glándulas sudoríparas. Está muy perfeccionado en comparación con los Cordados inferiores.Mediante estructuras especializadas se consigue filtrar los líquidos internos al margen del medio externo, a la vez que mantiene en equilibrio el nivel de todos ellos dentro del cuerpo.

Reproducción [editar]
La reproducción de los Vertebrados es sexual salvo excepciones (ejemplo de algunos peces con casos de
hermafroditismo), habitualmente mediante sexos separados, con fecundación interna o externa, y tanto vivíparos como ovíparos. Los mamíferos presentan la mayor complejidad, en los cuales el embrión se desarrolla en el interior de la madre recibiendo el alimento a través de la placenta. Después de nacidas las crías la administración del alimento se efectúa mediante la leche segregada por las glándulas mamarias.


Animales Invertebrados

Se llama colectivamente invertebrados a todos aquellos animales (reino Animalia) que no se encuadran dentro del subfilo de los vertebrados (Vertebrata) del filo cordados (Chordata). El nombre alude a que, a diferencia de estos últimos, carecen de columna vertebral
El término invertebrados fue introducido por Lamarck, al que se considera fundador de la zoología de invertebrados. En la clasificación de Carlos Linneo los animales no vertebrados se repartían en insectos y gusanos (refiriéndose respectivamente a los artrópodos y los no artrópodos). En 1794 Lamarck subdividió a los que desde entonces se denominó invertebrados en: moluscos, insectos, gusanos, equinodermos y pólipos. En 1809 consideró ya diez clases: moluscos, cirrípedos, anélidos, cangrejos, arañas, insectos, gusanos, radiolarios (equinodermos), pólipos e infusorios. Entre 1815 y 1822 Lamarck publicó, en siete volúmenes, la Historia natural de los animales invertebrados, con descripciones de las especies entonces conocidas y que fue obra de referencia durante mucho tiempo. Aunque muchos de los nombres anteriores siguen utilizándose, sus límites han cambiado.
En la práctica profesional de la
zoología, y en su enseñanza, la distinción entre vertebrados e invertebrados sigue ocupando un lugar, siendo comunes los departamentos universitarios, revistas científicas o manuales de zoología dedicados a los invertebrados; aunque esto debe interpretarse como efecto de una tradición, y no como el reconocimiento de validez o utilidad científica para el concepto. En el tratamiento académico de la diversidad de los invertebrados se ha seguido utilizando extensamente la distinción de dos categorías: los artrópodos y los no artrópodos. Pero el problema que presentan éstos últimos es análogo al indicado más arriba para el concepto de “invertebrados
Tambien existen los Macroinvertebrados
En el lenguaje de la ecología acuática, el término macroinvertebrado se utiliza tradicionalmente para referirse a los invertebrados dulceacuícolas, incluyendo los insectos (sobre todo larvas y ninfas), crustáceos, moluscos (caracoles acuáticos y bivalvos) y planarias (platelmintos) que habitan en cauces de ríos, charcas, lagos, etc. Históricamente, su abundancia y diversidad se han utilizado como indicadores (bioindicadores) de la salud del ecosistema y de la biodiversidad local. Son un componente imprescindible en la cadena alimenticia.
Obtenido de "http://es.wikipedia.org/wiki/Invertebrado"